Piernas PERFECTAS

En una de mis anteriores entradas os hablaba de uno de mis accesorios de belleza corporal preferidos, el guante o manopla de Crin (+), un accesorio que además de exfoliar la piel aporta múltiples beneficios.

La exfoliación junto con la hidratación son dos pasos realmente importantes para que la piel luzca bonita pero en mi caso no cualquier producto vale, los pelos enquistados y las marcas que dejan al sacarlos junto a los moratones que me propino yo misma (porque no paro y siempre me doy algún golpe), son algunas de las "imperfecciones" que hacen que no me guste demasiado lucir piernas cuando hace calor.

He probado muchos productos y métodos, y por fin, después de muchos años, he encontrado mi combo perfecto, mi guante de crin y el aceite de oliva.

Puede que no siempre a diario, pero como máximo cada dos días durante mi ducha diaria, tras la limpieza  corporal habitual paso por toda la piel del cuerpo, aunque con mayor énfasis en las piernas, mi guante de crin, además de exfoliar produce un masaje muy agradable que ayuda a mejorar la circulación sanguínea. El uso del guante de crin es muy sencillo, rápido y de gran eficacia, por eso me gusta tanto, aunque lo que hace que la piel luzca radiante por más tiempo es la nutrición extra que aporta el aceite de oliva; aplicar aceite de oliva a modo de aceite corporal post ducha es uno de los mejores gestos que podemos ofrecerle a nuestra piel, nutre en profundidad y ayuda a mejorar la apariencia, flexibilidad y calidad de la piel.

Es posible que os resulte un tanto "escandaloso" o curioso el hecho de usar aceite de oliva en la ducha, seguro que más de una se imagina saliendo de la ducha con perfume a ensalada, pero nada más lejos de la realidad. El aceite recomendado para cuidados de piel es el de graduación 0'4º, su aroma es muy sutil y agradable, y sigue siendo un aceite virgen de presión en frío, es decir, un aceite de gran calidad nutricional y cosmética.